Nada puede detener nuestras memorias. Ni resquebrajar el ocre gusto a sal
e impotencia de los labios derramados.
¿Qué quedó y qué fue de tu ayer?
¿De mi ayer? ¿De tu presencia extraña, tan familiar ahora?
¿Quiénes eran?
¡¡No estábamos preparados!!
O si... quizás sí estábamos preparados.
Porq del odio también nace el amor
De la desesperanza, la mano q alivia y se tiende
De la suciedad y el olvido,
el recuerdo permanente y todos los miedos...
Fuerte fue La Plata verte bañada en aguas
Fue fuerte verte en amores